La principal actuación es la implantación de nuevos equipos separadores en la planta de tratamiento mecánico que permitan recuperar más residuos
Los residuos que dejamos diariamente en el contenedor de resto en la zona centro de la provincia de Castellón llegan a la planta de tratamiento de Reciplasa. La instalación cuenta ya con más de 20 años y la entidad pública está en pleno proceso de modernización. Recientemente, la Generalitat Valenciana ha otorgado a Reciplasa una ayuda de casi 1,8 millones de euros para los que Reciplasa ya ha presentado tres proyectos: la implantación de separadores balísticos y ópticos, que ya se ha ejecutado, y otros magnéticos y de inducción. Ignasi Garcia, presidente de Reciplasa, explica que “se trata de ir adaptando poco a poco la planta a los tiempos actuales y dotarla de las tecnologías más punteras para la separación de la basura y su aprovechamiento. El objetivo es llegar a los objetivos que nos marca la Unión Europea y minimizar la cantidad de rechazo que llega al vertedero, fomentando la economía circular”.
La modificación propuesta contempla la instalación de tres separadores ópticos, uno magnético y uno de inducción para la separación de envases y que tiene un plazo para la puesta en marcha de 19 meses. Estos separadores cuentan con un proceso más específico de detección de los distintos materiales PEAD, CBA, PP, PET, metales férricos y metales no férricos. Cabe recordar que los envases no deberían llegar a la planta ya que van al contenedor amarillo, pero que aún así, siguen estando presentes en la fracción resto, aquella que no puede dejarse en ningún otro contenedor de reciclaje o punto limpio. “La diferencia entre la separación en origen y la separación en la planta es el uso que se le puede dar posteriormente a los materiales, ya que si llegan mezclados con otros residuos, sus usos son mucho más reducidos que si se depositan en un contenedor junto a otros envases”, comenta Garcia.
La ejecución de estos proyectos permitirá recuperar más materiales para su posterior reutilización, lo que supondrá reducir un 5% la cantidad de residuos municipales que llegan al vertedero. Una actuación que beneficiará a 372.997 personas a las que presta servicio Reciplasa. Ignasi Garcia, manifiesta que “es una apuesta por la economía circular, porque los residuos que tiramos siguen teniendo un valor y con los que se pueden crear nuevos productos”. Además señala que “al ser una de las primeras plantas que se construyeron en España, se hace necesario contar con las mejoras que ha traído la tecnología al tratamiento de los residuos”.
La ayuda de 1,8 millones de euros de la Generalitat Valenciana, es la primera en los últimos 15 años que el ente autonómico concede a Reciplasa, dentro del convenio financiado por el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia. El presidente afirma que “esta ayuda no será la última. El consejo de administración tiene presupuestado el proceso de mejora de la planta en 40 millones de euros y esperamos la colaboración de las distintas instituciones porque el tratamiento de residuos es una cuestión muy importante que no podemos abordar solamente desde la administración local”.